Introducción:

Han sido semanas llenas de emociones, enseñanzas, sanidades, hemos visto el poder de Dios en la iglesia, vidas han sido transformadas.

Hay eventos en nuestras vidas que cambian el rumbo de nuestra historia por ejemplo el día que nos casamos, el nacimiento de un hijo, y que decir de lo que Jesús hizo en la cruz, eso hiso un antes y un después en la historia de la humanidad, después hubo un evento que cambio la historia de la Iglesia de Cristo, y ese evento sucedió el día de Pentecostés.

(Hechos 2:1-4) Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar. De repente, vino del cielo un ruido como el de una violenta ráfaga de viento y llenó toda la casa donde estaban reunidos. Aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.

Para entender un poco más esto, déjenme ponerlos en contexto hace un par de semanas vimos en Hechos 1 como nos hablaba de muchas cosas importantes por ejemplo las instrucciones que dejo Jesús para sus discípulos, Una vez, mientras comía con ellos, ordenó: No se alejen de Jerusalén, sino esperen la promesa del Padre, de la cual les he hablado.

Otra cosa importante era la unidad que había entre los Discípulos la palabra nos dice que compartían sus bienes y el pan. Ahora. Como dato histórico los judíos celebraban 3 fiestas anualmente, la Pascua, el Pentecostés y la fiesta de los tabernáculos.

(Éxodo 23:14-17) ¹⁴ »Tres veces al año harás fiesta en mi honor. ¹⁵ La fiesta de los Panes sin levadura la celebrarás en el mes de aviv, que es la fecha establecida. Fue en ese mes cuando ustedes salieron de Egipto. De acuerdo con mis instrucciones, siete días comerán pan sin levadura.

Nadie se presentará ante mí con las manos vacías.

¹⁶ La fiesta de la cosecha la celebrarás cuando recojas las primicias de tus siembras.

La fiesta de recolección de fin de año la celebrarás cuando recojas tus cosechas.

¹⁷ Tres veces al año todo varón se presentará ante mí, su Señor y Dios.

La fiesta de la Pascua tuvo su inicio cuando el pueblo de Israel estaba por salir de Egipto. La noche de su partida, Dios les indicó que debían celebrar la Pascua, además tenían que marcar sus puertas con la sangre de un cordero. Así, cuando el ángel viera la sangre en el marco de sus portales, seguiría su camino, perdonando la vida de los primogénitos de los hebreos.

Esta fue la primera Pascua de los hijos de Israel. Dios ordenó que esta fiesta se repitiera anualmente, recordando la salida y liberación de Israel de la esclavitud en Egipto.

Ahora la primera fiesta de pentecostés fue, Cincuenta días después del éxodo, los israelitas llegaron al monte Sinaí. Allí, Dios les dio la Ley por medio de Moisés y les ordenó observar sus mandamientos. También los mandó a celebrar ese día anualmente. Éxodo 23.

La fiesta de los tabernáculos o enramadas: Esta fiesta tiene una duración de siete días. Lo primero que Dios instruye es que el primer día y el último día de la fiesta son días de reposo para el Señor; es decir, la primera ofrenda que el pueblo debe presentar a Dios. Esta fiesta era una expresión de gratitud y adoración a Dios por su presencia en medio del pueblo y la provisión de la cosecha y el propósito de esta fiesta era para que sus generaciones sepan que Dios los hiso habitar en tabernáculos  cuando los saco de la tierra de Egipto.

(Levitico 23:39-4) A partir del día quince del mes séptimo, luego de que hayan recogido los frutos de la tierra, celebrarán durante siete días la fiesta del Señor. El primer día y el octavo serán de descanso especial. ⁴⁰ El primer día tomarán frutos de los mejores árboles, ramas de palmera, de árboles frondosos y de sauces de los arroyos, y durante siete días se regocijarán en presencia del Señor su Dios. ⁴¹ Cada año, durante siete días, celebrarán esta fiesta en honor al Señor. La celebrarán en el mes séptimo. Este será un estatuto perpetuo para las generaciones venideras. ⁴² Durante siete días vivirán bajo enramadas. Todos los israelitas nativos vivirán bajo enramadas, ⁴³ para que sus descendientes sepan que yo hice vivir así a los israelitas cuando los saqué de Egipto. Yo soy el Señor su Dios

Talvez no me estoy explicando y dirán esto que tiene que ver con Hechos 2 déjenme explicarlo de esta otra manera.
Jesús vino a cambiar las cosas y a cumplir las promesas del Padre. Jesús entrego y tomo su vida durante la fiesta de la Pascua, como señal, se ofreció como un cordero perfecto y sin mancha

(1 Pedro 1:19) sino con la preciosa sangre de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin defecto.

pero también tomo su vida nuevamente y resucito por que el tiene la autoridad para hacerlo.

(Juan 10:17-18) Por eso me ama el Padre: porque entrego mi vida para volver a recibirla. ¹⁸ Nadie me la arrebata, sino que yo la entrego por mi propia voluntad. Tengo autoridad para entregarla y tengo también autoridad para volver a recibirla. Este es el mandamiento que recibí de mi Padre

Cuando Jesús derramo su sangre estaba diciendo recuerdan cuando le dije a Moisés que pusieran sangre de cordero sobres sus puertas y ventanas para que se salvaran todos los primogénitos de Israel y un día después celebraban la libertad de los egipcios, pues hoy ofrezco mi sangre y mi vida para salvación de todo el mundo Juan 3:16

(Romanos 8:1-4) Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están en Cristo Jesús, ² pues por medio de él la ley del Espíritu de vida te ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. ³ En efecto, la Ley no pudo liberarnos porque la carne anuló su poder; por eso Dios envió a su propio Hijo en una condición semejante a la de los pecadores, para que se ofreciera en sacrificio por el pecado. Así condenó Dios al pecado en la carne, ⁴ a fin de que la justa demanda de la Ley se cumpliera en nosotros, que no vivimos según la carne, sino según el Espíritu.

Según varios eruditos Jesús dio cumplimiento a más de 300 profecías
Jesús vino a cambiar las cosas y a cumplir las promesas del Padre.

Pasaron 50 días después de la resurrección de Jesús y era el día de pentecostés y El Espíritu Santo llegó según la promesa de Cristo y nos dio una nueva ley, Ya no es una ley escrita en tablas de piedra, sino en lo corazones humanos y desde entonces decidió habitar dentro de nosotros ya no en tabernáculos ni templos sino dentro de nosotros, para entrar en su presencia todos los días de nuestra vida.

(Hechos 2:1-4) Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar. ² de repente, vino del cielo un ruido como el de una violenta ráfaga de viento y llenó toda la casa donde estaban reunidos. ³ aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. ⁴ todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.

La manifestación del Poder del Espíritu Santo fue derramada sobre todo creyente y discípulo de Jesús para dar testimonio y salvación de lo que Cristo hiso por nosotros y por la humanidad.

⁴ todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.

Este día fue el evento que cambio la historia, pues nació la iglesia de Cristo y con esto el Espíritu Santo comenzó a realizar las transformaciones en las vidas de las personas y uno de ellos fue Pedro, si Pedro aquel que negó a Jesús 3 veces, ese mismo día se levanto y por medio del poder del Espíritu Santo le dio revelación y comenzó a hablarles de Cristo.

(Hechos 2:22–41) ²² Pueblo de Israel, escuchen esto: Jesús de Nazaret fue un hombre acreditado por Dios ante ustedes con milagros, señales y prodigios, los cuales realizó Dios entre ustedes por medio de él, como bien lo saben. ²³ Este fue entregado según el determinado propósito y el previo conocimiento de Dios; y por medio de gente malvada, ustedes lo mataron, clavándolo en la cruz. ²⁴ Sin embargo, Dios lo resucitó, librándolo de las angustias de la muerte, porque era imposible que la muerte lo mantuviera bajo su dominio.

³²A este Jesús, Dios lo resucitó y de ello todos nosotros somos testigos. ³³ Exaltado a la derecha de Dios y, habiendo recibido del Padre el Espíritu Santo prometido, ha derramado esto que ustedes ahora ven y oyen.

³⁶ »Por tanto, que todo Israel esté bien seguro de que este Jesús, a quien ustedes crucificaron, Dios lo ha hecho Señor y Cristo».

³⁷ Cuando oyeron esto, todos se sintieron profundamente conmovidos y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles:

—Hermanos, ¿qué debemos hacer?

³⁸ —Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados —contestó Pedro—, y recibirán el don del Espíritu Santo. ³⁹ En efecto, la promesa es para ustedes, para sus hijos y para todos los que están lejos; es decir, para todos aquellos a quienes el Señor, nuestro Dios, llame.
⁴¹ Así, pues, los que recibieron su mensaje fueron bautizados y aquel día se unieron a la iglesia unas tres mil personas. 

Les hago nuevamente esta pregunta Hermanos ¿qué debemos hacer? como parte del cuerpo de Cristo y parte de su iglesia ¿qué nos corresponde hacer?

Si, justo lo mismo que hizo Pedro, como iglesia no podemos seguir siendo los mismo, como discípulos de Cristo no podemos seguir siendo los mismos.

No puedes seguir siendo el mismo.

Hace un par de semanas hubo un evento aquí en la iglesia el Kickstar, fue de mucha bendición, fue algo fresco que logro encender nuestros corazones, y Paco una semana antes nos hablaba de hechos 1, nos hablaba de aquel sueño o visión que tuvo donde encendía las colas de aquellas zorras y comenzaban a quemar todo, nuestro espíritu fue encendido y nos corresponde correr por la ciudad para encenderla.

Durante el evento del kickstar tuvimos el gozo y el honor de hospedar a una pareja de misioneros aprendimos mucho de ellos, pero hubo tres cosas que marcaron mi forma de ver la iglesia.

Tres cosas que debemos hacer como Discípulos de Jesús

1.- Vivir en Unidad 

Cada uno de nosotros tiene una forma diferente de ver la unidad según nuestra conveniencia, para mi la unidad era algo así como el grupo de hermanos que tienen una vida en común junto con más hermanos y preguntarles el domingo ¿como están? Y creía que eso era todo, un día un hermano aquí presente me dijo, muchos hermanos solo me preguntan si estoy bien, esperando que yo les diga si, para poder irse en paz, realmente no están interesados en escucharme y saber lo que tengo. Y eso lo recordé con los misioneros porque ellos van mucho mas allá, viven como discípulos de Jesús si alguien no tiene para un viaje ellos cooperan entre todos y se a completan, tratan de que ninguno se quede, comparten su comida todos los días, se preguntan cómo están y ellos tienen la completa seguridad de que el otro hermano lo escuchara lo aconsejara y le ayudara en la cosa que sea que este pasando.

Y yo les decía como viven así, me dieron una respuesta sencilla estamos unidos a Cristo y por su gracia él nos hace amarnos, esto debemos mostrarlo al mundo.
Miren lo que dice:

(Efesios 2:6-8) (Efesios 4:3-6) y en unión con Cristo Jesús, Dios nos resucito y nos hizo sentar con el en regiones Celestiales. ⁷ para mostrar en los tiempos venideros la incomparable riqueza de su gracia, que por su bondad derramó sobre nosotros en Cristo Jesús.

Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz. Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también fueron llamados a una sola esperanza; un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo; un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos y por medio de todos y en todos.

Esto es algo que debemos entender si no estamos unidos a Cristo difícilmente vamos a poder tener unidad entre nosotros. Y aun más difícil va ser mostrarlo a las personas que están afuera.

Todos aquí estamos conscientes de que Dios nos dio la hermosa tarea de salir y llevar el mensaje de la salvación por todo el mundo. 

(Hechos 2:42–47) ⁴² Se mantenían firmes en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en el partimiento del pan y en la oración. ⁴³ Todos estaban asombrados por los muchos prodigios y señales que realizaban los apóstoles. ⁴⁴ Todos los creyentes estaban juntos y tenían todo en común: ⁴⁵ vendían sus propiedades y posesiones, y compartían sus bienes entre sí según la necesidad de cada uno. ⁴⁶ No dejaban de reunirse unánimes en el Templo ni un solo día. De casa en casa partían el pan y compartían la comida con alegría y generosidad, ⁴⁷ alabando a Dios y disfrutando de la estimación general del pueblo. Y cada día el Señor añadía al grupo los que iban siendo salvos.

Cuando hay unidad en el cuerpo de Cristo el Espíritu Santo se manifiesta.

2.- El Espíritu Santo

Es a través del Espíritu Santo que nosotros podemos ser transformados y es el quien a través de nosotros las personas son añadidas.

Si recordamos una ves que Pedro fue lleno del Espíritu Santo enseguida hubo una transformación una revelación divina y con un solo discurso el Espíritu Santo añadió a mas de 3 mil personas. Nosotros hermanos tenemos ese mismo Espíritu el cual en este momento esta encendido. Y a través de su poder muchos serán añadidos.

¿Cuantos discípulos de Jesús hay ahora en este lugar?

Conclusión.

3.- Hechos se sigue escribiendo.

El libro de Hechos es un libro que se sigue escribiendo, el Espíritu Santo aún esta activo dentro de nosotros, su fuego arde como una antorcha y todo aquel que lo busque lo encenderá y tu hermano, hermana eres parte de esta historia, tu estas escribiendo una nueva página, imagina esto: cada vez que sales a la calle y llevas el mensaje de Cristo se escribe una nueva historia, cada vez que oras por un enfermo y sana, se escribe una nueva historia, cada vez que oras por un muerto y se levanta, se escribe una nueva historia, cada vez que siembras en buena tierra, se escribe una nueva historia, cada vez que un creyente se une al cuerpo se escribe una nueva historia.

¿Qué vamos hacer con esto tan bello que el Espíritu Santo nos dio en el día Pentecostés?

Vamos a esperar a que se apague o vamos a salir en unidad juntamente con Cristo y guiados por su Santo Espíritu encender nuestra ciudad.

Predicador Antonio Acosta
Predicación del 27 de abril de 2025 en «La Promesa del Padre»